El peso corporal es un parámetro ampliamente utilizado para valorar el estado nutricional de una persona y muchas personas piensan que la pesa o báscula puede indicarnos las condiciones de salud de nuestro organismo. Sin embargo, no siempre tener un peso adecuado según la estatura y la edad es sinónimo de buena salud.

Detrás del peso corporal se esconde su composición, es decir, la proporción de ese peso representada principalmente por el agua corporal, masa grasa y la masa magra, entre cientos de componentes mas.

Asimismo, si tenemos un peso elevado de acuerdo a nuestra altura, sexo y edad, pero la mayor parte del mismo está compuesta por masa muscular, la salud saldrá beneficiada. Ésto es lo que típicamente ocurre con los deportistas, ya que al aplicarles la fórmula para conocer su índice de masa corporal (IMC), suele indicarnos la presencia de sobrepeso u obesidad, pero esto es totalmente erróneo ya que su grasa corporal no es excesiva e incluso están bajo los parámetros promedio.

Por ello, siempre debemos prestar atención a la composición corporal y no únicamente a parámetros globales como peso y el índice de masa corporal (relación entre el peso y la estatura), ya que son indicadores que si bien tienen una gran correlación con la cantidad de grasa en el cuerpo, no indica de manera exacta la proporción de grasa corporal y por ende, los eventuales riesgos para la salud.

Además se ha comprobado que aquellas personas con una proporción de grasa y peso normal que concentran su grasa corporal en el abdomen tienen más riesgo de sufrir eventos cardiovasculares que si dicha grasa se distribuyera uniformemente a lo largo del cuerpo.

En resumen, si usted tiene un peso normal pero nota un abdomen prominente (panza), solicite una evaluación de sus compartimientos corporales para controlar mejor su salud. Por el contrario, si es un atleta o deportista y su IMC le indica la presencia de obesidad, conozca mejor su porcentaje de masa muscular para despreocuparse por eventuales problemas de salud y/o evaluar mejor los cambios en el rendimiento de sus entrenamientos. Así mismo se recomienda a personas bajo peso o con sobrepeso u obesidad que se estén sometiendo a un tratamiento nutricional y/o una rutina de actividad física, observar su(s) progreso(s) y mantener su motivación, a pesar de haber disminuido poco de “peso”. La masa magra pesa mucho mas que la masa grasa pero tiene una menor volumen y si estimulamos nuestros músculos con diversos ejercicios, perderemos peso de la grasa acumulada y ganaremos peso muscular, mejorando así nuestro estado de salud pero observando una poca variación en los resultados numéricos (ej. PESO).

El peso se seguirá utilizando, porque al ser un parámetro global es lo básico que debemos saber de una persona, pero en situaciones particulares, no podemos confiar exclusivamente de este indicador, sino que debemos conocer en profundidad las características de nuestro cuerpo.